Hace ya una semana que dejábamos Nantes, con una carretera abarrotada y un lento llegar a Bayonne para pasar la noche. El hotel espantoso, de carretera y en un polígono industrial, pero Bayonne nos encantó. Con este aire decadente de las viejas ciudades costeras francesas.
El último día de viaje, optamos por la ruta Pamplona-Logroño-Soria-Majaelrayo, que recomendamos. Por lo bonito de sus paisajes, la tranquilidad y comodidad de sus carreteras. Llegada a nuestra casa con ilusión. Con la presencia de nuestra familia nantesa flotando todavía por el aire.
Y una sorpresa.. que llegan los titiriteros. Pilar, Luque , Mati y su compañero, las niñas Sabina y Simona. Salían de Campillo con su burro y su carreta. Llegaron a nuestro pueblo pasadas las 10 de la noche. Acampada rápida en el pinar, agua para el burro, cena para las niñas, y a dormir. Al día siguiente por la tarde, actua
ción en la plaza. Posterior cena en nuestra casa, con larga charla. Sabina atónita viendo por primera vez anuncios en la tele. Simona bañada y perfumada durmiendo en nuestra cama.
Con apenas 1/2 día para tomar respiro, nos esperaba la mani laíca de madrid, a la que acudimos Carmen y nosotros , con un calor sofocante, pero con mucha ilusión. Enrique e Ismael ya en Tirso Molina. Madrid, tomada por los "catoliquitos" del papa. Y nosotros , con casi dos horas de espera hasta poder llegar a Sol. Ambiente festivo. Mucho baile, mucha batucada, consignas correadas con alegría. Un espontáneo que nos jalea "¡Sois lo mejor de Madrid!" , "¡ Y de la Sierra Norte!" le respondo. En sol se mascaba la tensión. Grupos de peregrinos rezando, dando vivas al papa,
y ondeando banderas. Algunas discusiones "laicos-peregrinos". La policía . Llegan refuerzos. Ahora estamos pegaditos a las "lecheras". Se nota como les va creciendo el nerviosismo. Son las 10 de la noche y decidimos marcharnos, que hay que volver al Valle. Andando hasta San Bernardo. Sorteando miles de católiquitos. Banderas, Vivas al papa a nuestro paso. un momento de acoso por parte de unas chicas argentinas. Un grupo que se pone a rezar un padrenuestro por la salvación de nuestras almas. Un vecino que se indigna por 
nuestras pancartas. Somos pacíficos. Nos subimos al coche y procuramos relajar la tensión con bromas. A los pocos minutos se desencadenaría la violencia policial. Desde aquí quiero hacer llegar nuestra indignación.. ¡No hay derecho! Nos estábamos manifestando pacíficamente. No sé cómo permitieron ese recorrido perverso y la presencia masiva de católicos provocando. Espero que a estas horas ya , de verdad, se haya abierto una investigación sobre los abusos policiales, y que estas cosas, nunca vuelvan a ocurrir.
Y una sorpresa.. que llegan los titiriteros. Pilar, Luque , Mati y su compañero, las niñas Sabina y Simona. Salían de Campillo con su burro y su carreta. Llegaron a nuestro pueblo pasadas las 10 de la noche. Acampada rápida en el pinar, agua para el burro, cena para las niñas, y a dormir. Al día siguiente por la tarde, actua
ción en la plaza. Posterior cena en nuestra casa, con larga charla. Sabina atónita viendo por primera vez anuncios en la tele. Simona bañada y perfumada durmiendo en nuestra cama.
Con apenas 1/2 día para tomar respiro, nos esperaba la mani laíca de madrid, a la que acudimos Carmen y nosotros , con un calor sofocante, pero con mucha ilusión. Enrique e Ismael ya en Tirso Molina. Madrid, tomada por los "catoliquitos" del papa. Y nosotros , con casi dos horas de espera hasta poder llegar a Sol. Ambiente festivo. Mucho baile, mucha batucada, consignas correadas con alegría. Un espontáneo que nos jalea "¡Sois lo mejor de Madrid!" , "¡ Y de la Sierra Norte!" le respondo. En sol se mascaba la tensión. Grupos de peregrinos rezando, dando vivas al papa,
y ondeando banderas. Algunas discusiones "laicos-peregrinos". La policía . Llegan refuerzos. Ahora estamos pegaditos a las "lecheras". Se nota como les va creciendo el nerviosismo. Son las 10 de la noche y decidimos marcharnos, que hay que volver al Valle. Andando hasta San Bernardo. Sorteando miles de católiquitos. Banderas, Vivas al papa a nuestro paso. un momento de acoso por parte de unas chicas argentinas. Un grupo que se pone a rezar un padrenuestro por la salvación de nuestras almas. Un vecino que se indigna por 
nuestras pancartas. Somos pacíficos. Nos subimos al coche y procuramos relajar la tensión con bromas. A los pocos minutos se desencadenaría la violencia policial. Desde aquí quiero hacer llegar nuestra indignación.. ¡No hay derecho! Nos estábamos manifestando pacíficamente. No sé cómo permitieron ese recorrido perverso y la presencia masiva de católicos provocando. Espero que a estas horas ya , de verdad, se haya abierto una investigación sobre los abusos policiales, y que estas cosas, nunca vuelvan a ocurrir.
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