sábado, 6 de junio de 2015

MYAU 2015, el hombre esquizofrenico

Segunda jornada llena de sorpresas, no solo de payasos, equilibristas y malabares, pero tambien de encuetros de buena gente, los Ujados, los Luques, Marieta, los Santameras;; y mas amigos.
Para el premio Stuartini tuvimos una suerte de Mr. Hulot, capaz de iexplicarnos en que consiste el correo aereo.

Mas tarde el Loco Brusca consiguio, con no pocas dificultades tecnicas pero tambien de urbanidad, narrarnos las peripecias del hombre moderno, en una aventura de unos pocos personajes que podria ocurrir en cualquier ciudad del mundo.
Para la gala de anoche, ademas, un angel caido, una trapecista muy segura de si misma, una payasa muy poco segura de si misma, Brunito con sus diavolos, el loco haciendo de mono del acordeonista y el bufon-presentador sobrao, ahora picoleto, ahora desconcierto.
Aqui terminaba para servidor la jornada, me fui a la cama al arrullo del rock duro del concierto en la carpa, que debio durar hasta el amanecer;

viernes, 5 de junio de 2015

MYAU 2015, (des_equilibrios)

Estamos en Albendiego, en el III encuentro de malabaristas, artistas de circo y teatro de calle, en Albendiego (Guadalajara); aqui debe haber cerca de un centenar de estos, tal vez mas, cada uno con sus especialidades, pero todos con esa habilidad para hacer reir y soñar, tan escasa en esta parte del mundo por otra parte.
Por la tarde primera actuacion "a la gorra" para el premio Stuartini, aquel que otorgan los niños; en este caso una pareja de comicos de cine mudo nos conducen por el pueblo para hacer la foto de grupo, geniales.
Anoche, un magnifico espectaculo mitad historias, mitad diavolo, en el que los anhelos, las alegrias, los pesares de los espectadores se arrojaban al bote magico del diavolo y se plasmaban en travesuras y acrobacias que nos las devolvian en forma de relato.
Despues, sesion de cine Solo para payasos, del argentino Lucas Martelli, un documental dramatizado que nos muestra las reflexiones de decenas de payasos que se encuentran en una gigantesca cita en Buenos aires acudiendo desde cualquier parte del mundo.
La noche continuaba para muchos con musiquita abundante, que a algunos nos sirvio de cancion de cuna en nuestra tienda de campaña.