La cita, el sábado, era en El Ordial, a las 9.30 de la mañana. Sobre las 11.00 llegábamos nosotros. Encantados por el paisaje atravesado , el pueblo de Arroyo de Fraguas y el verdor del campo. Ahí nos encontramos ya con algunos amigos, Nuria, Raúl, Raquel, Eli.. Rápido, rápido, deja aquí los trastos que el alcalde ha iniciado la visita del pueblo. Corremos a sumarnos. Precioso el pueblo, y sobre todo, a primera vista, muy bien gestionado.
Ya de vuelta, a colocar el puesto de mermeladas. A ladito de las empanadas y madalenas de las eficientes organizadoras del evento. Han llegado más gente, más amigos, y muchas caras simpáticas a la par que desconocidas. Unas 200 personas en total. Nos juntamos en una pradera municipal . El sol empieza a apretar y se inicia la jornada. Presentación de Nuria y Raúl y presentación de todos. Con el consabido mapita chincheado en el que pinchas tu ubicación.
Entre presentación y presentación - mucha gente desconocida y muy interesante, llegados del encuentro de La Miñosa, al que no pudimos acudir pero que prometemos no perder el año próximo- echar un ojo al puestecillo. Vender alguna mermelada, y ¡Ay! la Cobita que se encuentra una hermana gemela. Y bodeguera , por lo que nos explica su inglesa dueña.
Llega la hora de comer. Una paella de verduras, preparada con esmero por parte de los organizadores. Excelente organización, la sangría por un lado, la paella por el otro. Comemos en compañía de Luque y Xexu, un lujo. Hablamos del teatro en casa que vienen a representar Laus y Carmina la última semana de Julio, y brevemente damos una primera vuelta al festival poético. Será el 24 de agosto.
Llega la difícil hora de la siesta. Dificil porque hace un calor de mil demonios y no hay dónde tumbarse a la sombra. Cuando ya vamos cerrando los ojitos en nuestros "horrores floridos" llega la alarma.
Se han encontrado dos cachorros de mastín, que el pastor no puede cuidar, y decidimos encontrarles familia.
Fue un rato divertido, los perritos pasan de mano en mano, y al final se quedan al cuidado de unas encantadoras niñas por un tiempo.
Se asientan los grupos de trabajo. El nuestro el de la posible envasadora, no llega a ninguna conclusión en firme, pero queda de manifiesto que necesitamos encontrar una solución a la legislación actual sobre las conservas artesanas. Y el primer paso a dar , podría ser esta envasadora común que, no solamente resultaría más económica que envasar cada uno por su cuenta, sino que sería un excelente motivo para vernos y hablar del tema.
Ponemos en común las conclusiones de todos los grupos de trabajo, algunos muy interesantes como el de la educación en el mundo rural a tenor de los recortes.
Un gran aplauso para los vecinos de los pueblos de la Sierra del Alto Rey.. se lo merecen
No hay comentarios:
Publicar un comentario