Seguimos con el
tai-
chi. A veces mejor, otras peor, pero le ponemos tesón y entusiasmo. Y ahí que el miércoles pasado nos decidimos unos pocos a practicar al
open air. En las eras del Espinar, a última hora de la tarde. El silencio , roto por los trinos de algún pájaro que nos acompañó , los mugidos de una vaquilla lejana que nos saludó, la belleza
sobrecogedora del entorno primaveral, el aire que nos acariciaba, todo contribuyó a hacernos el momento delicioso. Tenemos fotos, por gentileza del "Viento del
Ocejón". Un poco
descoordinados si que vamos...
Pero, a pesar de nuestra torpeza de principiantes, se pudo captar la belleza de algunos movimientos:
La "Gata", que no es principiante y sabe mirar dónde tiene que mirar,
Neda, y el Mono..
Alicia y la Gata, acariciando las
crines del caballo...
¡ Ese Pepe !... preparado para dar el salto del "Macaco"... y servidora, a punto de perder el equilibrio y la respiración, intentando emprender el vuelo..
Besos a todos por ese momento mágico, espero que se repita.
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